Leer "Poéticas Colectivas" es una experiencia única: las hojas se dividen en dos, tres y luego se hacen una. Los límites de las páginas se disuelven, y tanto el conocimiento como las obras se cruzan en el plano literal -las hojas- y en el teórico -las ideas.
Este libro de Bisman Ediciones, reúne el trabajo de Matéricos Periféricos y Arquitectura del Sur, dos colectivos de arquitectos rosarinos con ideales comunes.
Matéricos Periféricos fue creado en el 2001. Es un colectivo de profesionales y estudiantes de arquitectura liderados por Ana Valderrama y Marcelo Barrale, que trabajan por la equidad espacial de las ciudades latinoamericanas. Siendo el Área Metropolitana de Rosario su lugar a intervenir, cuentan con más de 20 obras en su trayectoria, dentro de las que se pueden encontrar una escuela, una radio, un club, un puente, miradores y tribunas, por mencionar solo algunos ejemplos. Su trabajo busca enriquecer la vida de comunidades y barrios mediante las posibilidades que otorga la arquitectura. Matéricos Periféricos ha obtenido diversos premios debido a sus aportes que han contribuido a redefinido la práctica profesional y académica.
Arquitectura del Sur, por su parte, fue fundada por Alejandra Buzaglo y Daniel Viu, y es una plataforma de proyectos y construcciones que se replantea cómo debemos accionar en el espacio público. Cuenta con la participación de estudiantes y docentes de la Universidad Nacional de Rosario, así como organismos de derechos humanos y movimientos sociales. Mediante salas, murales, muestras fotográficas, mobiliario y plazas –entre otros trabajos- el grupo interviene en el espacio público en pos de la memoria de hechos fundamentales de la historia de nuestro país y de nuestros derechos. El colectivo ha sido convocado para compartir su mensaje en varios países y ha sido premiado a nivel nacional e internacional.
“La palabra Poesía comparte con la palabra Poïesis el mismo origen etimológico: ambas derivan del antiguo término griego ποίησις o “hacer”. La poesía fue, primero un verbo, una acción y es por ello que entendemos el trabajo poético como un acto.”
“Poéticas Colectivas” nos recuerda, una vez más de qué está hecha la arquitectura rosarina.
